Cargando datos meteorológicos...

Aludes y Avalanchas

Boletin de Peligro de Aludes (BPA)
Seguimiento y Prevención de Aludes

Es un tema complejo que requiere la participación de varios actores y la aplicación de métodos científicos.

La nivología y la meteorología son dos ciencias estrechamente relacionadas pero distintas.

La meteorología estudia el estado de la atmósfera, incluyendo fenómenos como la temperatura, la precipitación, el viento y la nubosidad, en un momento y lugar determinados.

La nivología, por su parte, se centra específicamente en el estudio de la nieve, su formación, propiedades, estructura y comportamiento, especialmente en relación con los peligros de aludes. La vigilancia y prevención de aludes o avalanchas recae en equipos especializados que combinan conocimientos de meteorología, geología e hidrología. Estos expertos son conocidos como nivólogos y en muchos países, trabajan para agencias gubernamentales o servicios de protección civil.

Agencias Meteorológicas: Son las que emiten los comunicados o Boletines de Peligro de Aludes (BPA).

Estas agencias, como la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) en España, recopilan datos de estaciones meteorológicas y nivológicas para predecir las condiciones de la nieve y el riesgo de desprendimientos.

Rescate: Equipos como los Grupos de Rescate de Montaña, Bomberos, se encargan no solo de las operaciones de rescate, sino también de la prevención y la formación a la población.

Gestores de Estaciones de Esquí y Carreteras: En áreas específicas, como estaciones de esquí o carreteras de montaña, hay personal cualificado que gestiona el riesgo de manera local, incluso provocando avalanchas controladas para garantizar la seguridad.

Prevención y Alertas

La prevención se basa en dos pilares fundamentales: la información y la gestión del terreno.

Información (Alertas): La herramienta más importante es el Boletín de Peligro de Aludes (BPA). Estos boletines se emiten diariamente durante la temporada de invierno y contienen información detallada sobre:

El grado de peligro: Clasificado según la Escala Europea de Peligro de Aludes.

La estabilidad del manto nivoso: Descripción de las capas de nieve y los problemas de cohesión.

Localización del peligro: Qué altitudes y orientaciones son las más peligrosas.

Tendencia del riesgo: Si se espera que el peligro aumente o disminuya en las próximas horas.

Gestión del Terreno: Se implementan medidas para reducir el riesgo en zonas habitadas o de paso frecuente:

Obras de protección: Diques, vallas antiventisqueros y galerías para desviar o contener las avalanchas.

Cargas controladas: En áreas de alto riesgo, se detonan explosivos para provocar avalanchas de forma segura antes de que se vuelvan peligrosas.

¿Cómo se calculan las alertas?

El cálculo del riesgo no es una ciencia exacta, sino una combinación de datos, análisis y experiencia. Los nivólogos utilizan una pirámide de información para llegar a una conclusión:

  • Observación y Datos: Recopilan información de múltiples fuentes:
  • Datos meteorológicos: Temperatura, dirección y velocidad del viento, precipitación de nieve y lluvia.
  • Observación del terreno: Se realizan expediciones para cavar perfiles de nieve y analizar la estructura del manto nivoso, la fuerza de las capas y la presencia de capas débiles. También se observan las avalanchas que ya han ocurrido de forma natural.
  • Reportes de usuarios: La información de montañeros y esquiadores a través de aplicaciones o foros también contribuye a la evaluación.

Análisis y Previsión, con todos estos datos, se evalúan tres factores clave:

Probabilidad de desencadenamiento: ¿Qué esfuerzo es necesario para que se produzca una avalancha? (una persona, un grupo, de forma espontánea, etc.)

Distribución del peligro: ¿Dónde es probable que ocurran las avalanchas? (altitud, orientación de la ladera).

Tamaño esperado: ¿Qué tan grande podría ser la avalancha y cuál sería su potencial destructivo?

Clasificación en la Escala Europea: Finalmente, se asigna un nivel de peligro del 1 al 5, siguiendo la Escala Europea de Peligro de Aludes, que es un sistema estandarizado en toda Europa para que la información sea fácil de entender.

La clave está en que el riesgo cero en la montaña no existe. Las alertas sirven para que montañeros, esquiadores y otras personas que se mueven en este entorno puedan tomar decisiones informadas y responsables.

La Inteligencia Artificial en la previsión de aludes

Recientemente, la Inteligencia Artificial (IA) se está introduciendo en este campo. Debido a su alta capacidad para analizar enormes bases de datos, los modelos de IA pueden procesar la vasta cantidad de información meteorológica, histórica y de la estructura del manto de nieve para identificar patrones complejos. Estos patrones, a menudo invisibles para el ojo humano, permiten a la IA asistir a los nivólogos en la creación de pronósticos de riesgo más precisos y detallados, complementando la experiencia humana con una potencia de cálculo sin precedentes.

Val d'Aran centro de Predicción de Aludes:

AEMET Boletin de peligro de Aludes: 


EAWS - European Avalanches Warning Services:

Institut d'Estudis Andorrans
Previsión del tiempo para Vilafranca del Penedès.

El Meteograma se actualiza conforme avanza el día. (yr.no)